La Zona Franca La Plata ve el Futuro con Mayor Optimismo
EDICIÓN IMPRESA TRANSPORT & CARGO
La Zona Franca La Plata ve el futuro con mayor optimismo
Tras la eliminación de la doble Declaración Jurada Anticipada de Importación, espera la próxima inauguración de Tecplata.
La Aduana eliminó la doble Declaración Jurada Anticipada de Importación (DJAI), que se mantuvo a lo largo de todo 2012 y principios de este año, por la cual el Sistema María duplicaba los trámites y exigía dos declaraciones juradas, en cada operación. En esta decisión, fundamental para el sector, mucho tuvo que ver la gestión que, desde hace meses, se viene realizando desde la Concesionaria de la Zona Franca de La Plata, presidida por Marcelo Leite, y la Cámara de Usuarios de la Zona Franca de La Plata, bajo la presidencia de Gabriel Salomón y vicepresidencia de Enrique Bernabé. El punto final para esta disposición aduanera, muestra que las gestiones de las organizaciones involucradas funcionaron acorde a la importancia de los hechos.
Hoy, la herramienta de zona franca, en el país, está atravesando por un periodo de transición o de cambio de conciencia motivado principalmente por los operadores de parques que estamos promoviendo un cambio de legislación a los efectos de hacer de éstos enclaves verdaderos desarrollos de promoción y exportación de industria nacional y fundamentalmente de sustitución de importaciones. Las zonas francas, actualmente, se encuentran discriminadas por la legislación nacional debido a que si bien es posible la producción, existe una limitación para los industriales que aquí se radican ya que no pueden vender su producción en el mercado interno, esto, además, no armoniza con los beneficios que ésta misma herramienta otorga, en los países de la región, donde sí es posible producir y abastecer tanto los mercados externos como el mercado local, dijo a Transport & Cargo Marcelo Leite.
A juicio del directivo, el cambio de legislación, es fundamental para orientar esta herramienta y alinearla con la política comercial del país. Tenemos un fuerte compromiso con la producción nacional, queremos convertirnos en una plataforma de servicios para los proyectos industriales de pequeño o mediano porte, que pueden potenciarse con los beneficios que les ofrecería un cambio de legislación. Hay que aportar soluciones a los empresarios pymes que quieren exportar, que son los que mas dificultades tienen para penetrar con sus productos en mercados extranjeros.
Con expectativas
Para la Zona Franca de la Plata, la nueva terminal de contenedores de Tecplata, próxima a inaugurarse, genera enormes expectativas.
Si bien la ley que regula la actividad es nacional y los beneficios fiscales son básicamente sobre tributos aduaneros, la Zona Franca La Plata ha acompañado con un fuerte compromiso de inversión para los próximos 10 años al proyecto adjudicado a la firma Tecplata por parte de la provincia de Buenos Aires para transformar el Puerto La Plata en una terminal de contenedores. Este cambio cualitativo, que sufrirá el puerto que, históricamente, se dedicó a combustibles, traerá mucha actividad a la región capital de la provincia y, especialmente, a la zona franca.
Siempre sostuvimos que debíamos ser un eslabón fundamental en la cadena logística del Puerto La Plata y ésta es la oportunidad que se nos presenta para demostrar que estamos preparados para atender la demanda derivada de Tecplata. La experiencia internacional demuestra que las zonas francas brindan dinámica y facilidad en la operatoria de cargas, cuando operan de manera complementada con los puertos y no dudamos de que esta experiencia será positiva en todo sentido, sostuvo Leite.
Tomando en cuenta el éxito del régimen de zonas francas en algunos de los países de la región existen ejemplos interesantes para observar y seguir.
Dos casos para destacar son los de Colombia y Uruguay. Ambos han logrado bajo el régimen de zona franca generar actividad económica, atracción de inversiones, produccion, empleo y, básicamente, incrementar el producto bruto interno de sus economías. En Colombia, una modificación de su legislación, en el año 1996, creo un ámbito muy propicio para la instalación de empresas de todo el mundo en sus zonas francas, con miles de millones de dólares en inversión productiva. En Uruguay, con una buena legislación vigente, han logrado en algunas de sus zonas francas la instalación de empresas de servicios globales y, en otras, le están agregando valor a commodities de origen uruguayo y argentino.